jueves, 19 de mayo de 2011

Los medios masivos de comunicación durante el golpe militar.

Como anteriormente mencionamos, este duro golpe que tuvo la Argentina, se vio caracterizado entre otras cosas por la censura de los medios de comunicación : La televisión, la radio, el cine, la prensa.
Para comprender como fue que se desarrollo esta etapa, debemos comprender primero que era lo que buscaban los militares, las normas que se impusieron, las formas de reprimir y la relación del gobierno con las empresas periodísticas.



La censura empezó el mismo día que asumieron al poder,  cuando se entregó a los medios de
comunicación un conjunto de instrucciones titulado “"Principios y procederes para ser
seguidos por los medios de comunicación”" firmado por Corti, director de Prensa de la Junta Militar. 



El gobierno de facto creyó a los medios estratégicos para imponer su ideología, ya que veían a la sociedad reclamar por sus derechos, movilizarse, tener consciencia política, un alto nivel de organización y era eso justamente con lo que buscaban terminar.
Su estrategia consistía en homogeneizar los discursos que se transmitían en los medios masivos,  demostrando de cierta manera en que se basaba el sistema, exponiendo noticias que les permita a ellos construir la realidad que querían mostrar  y no permitiendo la transmisión de noticias que fueran inadecuadas y pudieran obstaculizar sus planes.
Fue así que durante los años que duró la dictadura, nunca cedieron el poder a los medios, sino que lo utilizaron para su propio beneficio. Es por esto que se habla de manipulación de la información, de desinformación, donde había hechos que eran ocultados al público, la censura era explícita, solo llegaban aquellas noticias admitidas por quienes se encontraban en el poder.  

Los medios se encontraban bajo sus órdenes, se adueñaron fácilmente de las radios y de los canales de televisión del momento, debido a que el gobierno anterior, ya había puesto a los medios en manos del estado y solo debían reemplazar a los funcionarios por militares. Es así, que una vez logrado lo recién mencionado, se cerraron empresas periodísticas, se encarceló a gente del medio, se hizo un allanamiento a la Federación Argentina de los Trabajadores de la prensa, se prohibieron las emisiones de algunas revistas, películas, programas de televisión, se produjo la "quema de libros", los diarios debido a su falta de libertad de expresión "transmitían en cadenas" (según varios especialistas que trataron el tema, entre otros, Rodolfo Terragno ) y  surgieron las listas negras, donde había nombres de gente del medio, que no podía participar y se tenían que exiliar para podre salvar sus vidas. 
Por otra parte, aquellos periodistas, empresarios, productores, actores, poetas, escritores que querían vivir en tranquilidad, seguir trabajando sin ser perseguidos, amenazados,debían seguir al pie de la letra las decisiones tomadas por las autoridades del momento. 
Buscaban con esto, aplicar el concepto de castigo y así lograr que haya cada vez menos reacciones de parte del pueblo.

Anteriormente, en el gobierno de 1973, se había dado a conocer una lista con términos que eran inapropiados. Luego, con los militares al mando, se transformaron en normas que tenían que ser respetadas si no querían que sus programas sean levantados del aire o lo que es mucho peor, que se tomaran represarías con los que formaban parte de ellos.

Luego de la existencia de las listas como normas, el mismo 24 de marzo de 1976, se reunió a todos los directores de los medios en la sede del Comando General del Ejército, donde se les dio a conocer la nueva realidad y lo que debían hacer. Se creo el “Servicio gratuito de lectura previa”, que como su nombre lo dice, se hacía una lectura previa de las obras , se modificaba si se podía y sino directamente no tenía permiso de ser publicada.  También en las radios y televisión, los programas políticos, noticieros, cine y demás, se nombraron a “asesores literarios”, persnas consideradas inofensivas , que dirían que era lo que podía ser transmitido y que no.

Por otro lado, La Secretaría de Inteligencia del Estado se adueñaba de materiales que mandaban a firmar, para luego recortarlos, introducir textos ajenos a la filmación en off, para notar la presencia de enemigos. Lo mismo hacían con las películas, se sacaban las partes que se creían incorrectas y en las revistas se encontraban frases a favor del régimen como ser:

Quien conoce el pensamiento de estos hombres de armas (en referencia a los miembros de la Junta) sabe que no vienen a perseguir a nadie [...] Las Fuerzas Armadas saben perfectamente que lo suyo es una misión de reordenamiento y reparación de la República”.
Diario La Razón, 27 de marzo de 1976. 


Los mismos que se sintieron más argentinos con el triunfo de nuestro equipo en el mundial están dispuestos a aplaudir los resultados positivos del Proceso. Sus expectativas son bastante concretas: paz, bienestar para todos, orden, libertad, seguridad, trabajo, salarios dignos y estabilidad”.
Radiolandia 2000, marzo de 1979. 



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